lunes, 8 de abril de 2019

Martes, V Semana de Cuaresma

Color: MORADO
(San Vicente Ferrer)
9 de abril de 2019

Primera lectura

Lectura del libro de los Números (21,4-9):

EN aquellos días, desde el monte Hor se encaminaron los hebreos hacia el mar Rojo, rodeando el territorio de Edón.
El pueblo se cansó de caminar y habló contra Dios y contra Moisés:
«¿Por qué nos has sacado de Egipto para morir en el desierto? No tenemos ni pan ni agua, y nos da náuseas ese pan sin sustancia».
El Señor envió contra el pueblo serpientes abrasadoras, que los mordían, y murieron muchos de Israel.
Entonces el pueblo acudió a Moisés, diciendo:
«Hemos pecado hablando contra el Señor y contra ti; reza al Señor para que aparte de nosotros las serpientes».
Moisés rezó al Señor por el pueblo y el Señor le respondió:
«Haz una serpiente abrasadora y colócala en un estandarte: los mordidos de serpientes quedarán sanos al mirarla».
Moisés hizo una serpiente de bronce y la colocó en un estandarte. Cuando una serpiente mordía a alguien, este miraba a la serpiente de bronce y salvaba la vida.

Palabra de Dios
Te Alabamos Señor

Salmo
Sal 101,2-3.16-18.19-21

R/. Señor, escucha mi oración, que mi grito llegue hasta ti

V/. Señor, escucha mi oración, que mi grito llegue hasta ti; no me escondas tu rostro el día de la desgracia.
Inclina tu oído hacia mí; cuando te invoco,
escúchame enseguida. R/.

V/. Los gentiles temerán tu nombre,
los reyes del mundo, tu gloria. Cuando el Señor reconstruya Sión y aparezca en su gloria, y se vuelva a las súplicas de los indefensos, y no desprecie sus peticiones. R/.

V/. Quede esto escrito para la generación futura, y el pueblo que será creado alabará al Señor. Que el Señor ha mirado desde su excelso santuario,
desde el cielo se ha fijado en la tierra,
para escuchar los gemidos de los cautivos y librar a los condenados a muerte. R/.


Lectura del santo evangelio según san Juan (8,21-30):

En aquel tiempo, dijo Jesús a los fariseos:
«Yo me voy y me buscaréis, y moriréis por vuestro pecado. Donde yo voy no podéis venir vosotros».
Y los judíos comentaban:
«¿Será que va a suicidarse, y por eso dice: “Donde yo voy no podéis venir vosotros”?».
Y él les dijo:
«Vosotros sois de aquí abajo, yo soy de allá arriba: vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo. Con razón os he dicho que moriréis en vuestros pecados: pues, si no creéis que Yo soy, moriréis en vuestros pecados».
Ellos le decían:
«¿Quién eres tú?».
Jesús les contestó:
«Lo que os estoy diciendo desde el principio. Podría decir y condenar muchas cosas en vosotros; pero el que me ha enviado es veraz, y yo comunico al mundo lo que he aprendido de él».
Ellos no comprendieron que les hablaba del Padre.
Y entonces dijo Jesús:
«Cuando levantéis en alto al Hijo del hombre, sabréis que “Yo soy”, y que no hago nada por mi cuenta, sino que hablo como el Padre me ha enseñado. El que me envió está conmigo, no me ha dejado solo; porque yo hago siempre lo que le agrada».
Cuando les exponía esto, muchos creyeron en él.

Palabra del Señor
Gloria a ti Señor Jesús

REFLEXIONANDO LA PALABRA

“Muchos creyeron en Él”. Qué fuerza en la Palabra de Jesús, que cambia la vida de muchas personas, dos mil años después de su presencia entre nosotros. Y no solo la de los santos. También la de muchos que andan en búsqueda de una vida mejor.

Con sus palabras y con sus obras, Jesús va revelando su identidad más profunda. Poco a poco, va diciendo que es el Hijo de Dios. Con sus palabras y con sus obras, los “signos”, como los llama el Evangelio joaneo.

Pero el pueblo hebreo se muestra poco dispuesto a cambiar. Le pasa a Jesús lo que le pasaba a Moisés en la primera lectura. A pesar de todo lo que ha hecho Dios por su pueblo, siempre hay descontentos, que arrastran a muchos detrás de ellos. Y se produjo el castigo divino, con las serpientes.

Moisés tiene que salir en defensa del pueblo, para evitar su extinción. Y levantar una serpiente de bronce, para que no murieran muchos en el camino. El nuevo Moisés, Jesús, también será levantado. Y, desde lo alto de la cruz, con su sufrimiento y su muerte, nos da la salvación.

Muy pronto vamos a contemplar la cruz, el Viernes Santo. Mirándola, adorándola, podemos recordar que sus heridas nos han curado. Y que hasta ese punto amó Dios al mundo, hasta entregarnos a su Hijo. Contempla la cruz, cuando te sientas cansado. Cristo te mira desde lo alto, para mostrarte el camino.

Tu hermano en la Fe José Alirio Lagarejo Palomeque

"Yo he venido para que tengan vida y vida en abundancia" (Jn 10,10).✍

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

LECTURAS: Lunes, XXXII Semana. Tiempo Ordinario: 7 de noviembre del 2022

  XXXII Semana.  Tiempo Ordinario   Lunes, 7 de noviembre del 2022   Color:  VERDE Si siete veces vuelve tu hermano arrepentido, perdónalo P...

Las más visitadas